miércoles, 13 de marzo de 2013

Siempre, después


Siempre me gustó tú mirada, antes de niña, ahora de mujer. 

Siempre, después me gustaron tus manos en mi cara, los círculos que hacías en mi cabello, la inocencia de tú genero dócil y ataviado por doquier.

Siempre, después yo volaba si te sentabas a mirarme callada, hablándome en un idioma que no conocía, que luego empecé a comprender.

Siempre, después nos miramos y cruzamos gestos de ser, algo más que los besos que estábamos empezando a tener.

Siempre, después avanzamos, recorrimos espacios privados y ves, es lo que ahora te digo, siempre, después me consigo con tú increíble manera de ser.

Siempre, después hay errores que cualquiera puede tener, pero si estás dispuesta a cambiarlos, te espero y yo sé porqué. 

2 comentarios:

Liliana Ibáñez dijo...

Siempre, es de mis favoritos.

MAR dijo...

Uno de los mejores... Para mi.